El vuelo del Cuatro Vientos

Tal día como hoy pero de 1933, se realizó una de las epopeyas mas grandes de la aviación española, cruzar el Océano Atlántico sin escalas en un vuelo de casi 8.000 km, el "vuelo del Cuatro Vientos" siendo mas largo,  en mas de 2.000 km al anterior record, el vuelo del "Espíritu de San Luis".

Como es costumbre en nuestra España se le suele dar mas valor a lo de fuera y no sabemos valorar lo nuestro, esta efeméride fue un hito en la época, aunque el Espíritu de San Luis ganó un premio al volar por primera vez de Nueva York a París, en 1922, (no siendo el primero que cruzaba el atlántico, ya que lo hizo el también Español "Plus Ultra" de Ramón Franco, aunque con escalas),  no quita valor a que 11 años mas tarde se batiera el récord de distancia recorrida al hacer un vuelo de casi 8.000 km sin escalas.

J. Collar y M. Barberán

El vuelo partió el 10 de Junio, del aeródromo de Tablada (Sevilla), a las 04:40. A bordo el Capitán de Ingenieros Mariano Barberán y Tros de Ilarduya como piloto y navegante, acompañado a los mandos por el Teniente de caballería Joaquín Collar Serra. Como mecánico en tierra, el Sargento Modesto Madariaga. 

El avión era un Breguet XIX GR (Gran Raid) Super-Bidón, sesquiplano, con motor Hispano Suiza 12 Nb de 650 caballos y 12 cilindros en V. Este fue fabricado especialmente para el vuelo, se le amplió el depósito central  de tal forma que cupieran 5000 litros de gasolina y 200 de aceite. De lo único que carecían era de radio, ya que no se incluyó para ahorrar peso.

El cruce del Atlántico fue la mayor distancia volada hasta ese momento sobre el mar, Sevilla, Madeira, San Juan de Puerto Rico, Guantánamo (Cuba) y aterrizando en Camagüey (Cuba) el 11 de junio de 1933 a las 20:45 hora local, después de 39 horas y 55 minutos de vuelo  y 7.895 km.

El día 20 saldrían con destino a Ciudad de México, pero probablemente un temporal acabaría con el avión en el mar, o bien se estrellarían en la sierra de Mazateca en el estado de Oxaca en México, como contaron algunas crónicas de la época, lo cierto es que hasta día de hoy no se sabe a ciencia cierta lo que pasó con el vuelo del Cuatro Vientos. 

La ruta que abrieron, cuya carta de navegación fue entregada al capitán guadalajareño Pedro Vives en La Habana, continúa utilizándose, al día de hoy, por la aviación comercial.

Sirva esta entrada como homenaje en el aniversario de su llegada a Cuba.


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