sábado, 3 de noviembre de 2012

De cruasanes y cabezas de turco

Hablando con un amigo, me preguntaba si sabía el origen de la expresión "cabeza de Turco", tras lo cual me puse manos a la obra, a investigar un poco, y como un sabueso encontré varias razones mas o menos creibles sobre el origen de la frase.


1ª.- Según la Wikipedia:
 Se denomina cabeza de turco a una persona o grupo de ellas a quienes se quiere hacer culpables de algo de lo que no son, sirviendo así de excusa a los fines del inculpador. De manera más específica, se emplea este apelativo para calificar a aquellos sobre quienes se aplica injustamente una acusación o condena para impedir que los auténticos responsables sean juzgados.
Desde una perspectiva histórica, en el período de las Cruzadas, los cruzados libraron cruentas batallas contra los turcos. La animadversión que se profesaban ambos bandos era tan grande, que para un cristiano cercenarle la cabeza a un turco era un logro encomiable. Cuando lo lograban, los cruzados colgaban la cabeza en un mástil de barco o la ensartaban en una lanza y los soldados le acusaban de todos los males habidos y por haber. Por este motivo, se dice que alguien es cabeza de turco, cuando es objeto de todo el daño y las acusaciones de las que son culpables otros.


Nada que ver con el nudo "cabeza de turco"
Este se parece a un turbante.


Bueno, pues seguí buscando y encontré esto en taringa:
Ser cabeza de turco 

Esta expresión alude a quien resulta objeto de acusaciones o responsabilidades y sujeto unilateral de las mismas, siendo culpado, generalmente, por las acciones de todo un grupo. Proviene, probablemente, de tiempo de las Cruzadas, cuando los cristianos se dedicaban a cortar las cabezas de los turcos como quien pela patatas. Otro posible origen puede proceder de la batalla de Lepanto (7 de octubre de 1571), cuando el almirante turco Alí Bajá fue decapitado por un galeote cristiano con su hacha de abordaje, tras una rebelión de los cristianos prisioneros que navegaban en las galeras turcas. Aquel célebre episodio de Lepanto terminó con una escabechina : sólo 50 de las 300 naves turcas pudieron escapar y se contaron por miles las cabezas de turco que cayeron bajo los filos de las espadas cristianas. 

Bueno, ya vamos cambiando algo, en la época de las cruzadas no existía un "imperio turco", se estaba fraguando, aunque se podría decir que el enemigo era el turco, fue mas adelante cuando se crea el imperio otomano, y el islam está casi bajo el control de Estambul, podemos dar mas veracidad a la segunda parte de este comentario.

Seguimos buscando y encontré esta entrada 
Esta frase surgió en el siglo XVII fruto del temor y el odio que el Imperio otomano inspiraba a la Cristiandad.
Como ejemplo de esta preocupación y miedo ante la amenaza turca se puede citar el siguiente pasaje deDon Quijote:” [...] de lance en lance, vino a contar algunas nuevas que habían venido de la corte, y, entre otras, dijo que se tenía por cierto que el Turco bajaba con una poderosa armada, [...]”
La fuerza naval de los turcos y la constante amenaza militar que suponía, hicieron del término turcoparadigma de lo temible y odioso, por lo que se culpaba al turco (como ente colectivo) de todo cuanto malo ocurría.
En esta incriminación era frecuente que pagasen justos por pecadores, y la expresión se asimiló al inocente que carga con la culpa que se le imputa, como el chivo expiatorio que redime a su pesar faltas y pecados de otros.
Y también se asimiló al que carga con las culpas de persona principal a la que no se puede acceder por su alto rango o poderío. Al que se le imputan los delitos por ser la persona interpuesta en los asuntos en que se manyiene oculto el verdadero responsable. En este sentido nació la locución cabeza de turco, quizás calcada de cabeza de hierro (del italiano testaferro).
Pancracio Celdrán, en su Diccionario de frases y dichos populares comenta que “parece, aunque no hay documentación fiable que lo apoye, que el porqué de la frase tiene que ver con cierto uso en el que se daban lanzadas a un muñecón de madera con cabeza alusiva al Gran Turco, sultán o autoridad máxima de la Sublime Puerta.”

Bien, pues tenemos, la costumbre de cortar las cabezas al enemigo en el combate, el temor a los turcos, la costumbre de ensañarse con un muñeco con forma de cabeza y turbante, que se suponía que era el sultán, el corte de cabeza del sultan en lepanto. y la mezca de cabeza de hierro, testaferro, y su españolización.
Seguimos buscando y encontramos el origen del croisant

Al promediar el siglo XVII, y durante largo tiempo, la moda de lo turco se apoderó de la mayor parte de Europa. El café a la turca, los divanes (llamados otomanas en Occidente), las pinturas con sultanes y odaliscas invadieron los salones. Personajes de ese origen eran presencia habitual en las farsas, como ocurre en algunas de las que escribió Moliere. También los vieneses se dejaron ganar por esa influencia y crearon una masa cuya forma imita el símbolo de Turquía y que hasta hoy se llama medialuna (croissant, en francés), una manera algo burlona de celebrar un triunfo sobre los otomanos a las puertas de Viena. La expresón “ser cabeza de turco” (servir de tete de turc) nacio en Francia y pronto se difundió en España y América. Proviene de las ferias de diversiones y se debe a los juegos de tiro al muñeco. En ellos nunca faltaba alguno vestido de turco: quien lo descabezaba o le volteaba el fez rojo ganaba un premio. Hoy, hacer de alguien la cabeza de turco es endilgarle la culpa de otros. Una cabeza fácil de arrancar y que siempre  viene bien para no perder la perder la propia.
Otra versión aquí
Pero… ¿Cuál es el origen de este pequeño placer? ¿Cuál es su historia? Eran preguntas que se acumulaban en mi cabeza. Y fijaos lo que es el destino que leyendo un libro de lo más interesante llamado: “Historia del mundo sin los trozos aburridos”, el autor Fernando Garcés Blázquez nos invita de una forma amena, divertida y original a dar un paseo por nuestra historia con anécdotas tan singulares como la que os transcribo directamente.
“Bizancio fue una polis griega situada a la entrada del estrecho del Bósforo, sobre una parte de la actual ciudad de Estambul y la antigua Constantinopla, en Turquía. De acuerdo con la leyenda, esta polis logró repeler un ataque nocturno gracias a la luz de la luna. Los bizantinos, en honor a la diosa lunar Artemisa, decidieron adoptar el emblema de la luna creciente. Muchos  siglos después, esta ciudad volvió a ser sitiada, pero esta vez los invasores lograron penetrar dentro de sus muros. Eran los poderosos ejércitos turcos otomanos, que orgullosos de su victoria decidieron adoptar el símbolo de la media luna en sus estandartes militares.
No mucho después, estos mismos ejércitos se extendieron por toda Asia y el norte de África. Al mismo tiempo, también avanzaron por la Europa que baña el Danubio, hasta sitiar Viena, la capital del imperio austriaco, hacia 1683. Cuenta la tradición que, una noche -idealmente con luna creciente-, un polaco de veintitrés años llamado Georg Franz Kolschitzky ( ca. 1640-1694) atravesó las líneas turcas, y regresó con información de vital importancia para los sitiados: el rey de Polonia enviaba refuerzos. Los austriacos, entonces, se armaron de valor y pasaron al ataque, venciendo a los turcos que huyeron abandonando armas y provisiones, entre ellas varios sacos de café.
En agradecimiento a sus servicios, Kolschitzky fue recompensado con estos sacos, y el héroe de la batalla decidió abrir el primer café en Viena. Hay que precisar que en aquella época, los cafés no eran desconocidos en Europa -existían varios en París, Londres-, por lo que no es posible que el café de Kolschitzky fuera el primero, sin embargo, su popularidad eclipsó a sus predecesores. Fuera como fuese, para evitar que aquella victoria se olvidara, el soldado cafetero le pidió al panadero que crease un nuevo dulce. Poco después, en el café se vendía un pastel con forma de halbmond (“media luna” en alemán),como mofa del ejercito derrotado. Un siglo más tarde, una jovencísima reina nacida en Viena y llamada María Antonia Josefa de Habsburgo-Lorena ( 1755-1793 ), más conocida como María Antonieta, llévo elhalbmond a Versalles, en París. Allí, el deliciosos pastel recibió el nombre por el cual es hoy mundialmente conocido: croissant (“creciente”, como la media luna).”

Me encanta indagar el origen de las cosas.
Por último encontré esto
turcosjp.jpg
En una batalla cuando un cristiano conseguía matar a su entonces enemigo turco, era un logro muy importante para ellos, por lo que le cortaban la cabeza y la colgaban en un lugar donde se pudiera ver, para que todos contemplaran lo que había conseguido. Era entonces cuando a ese turco se le culpaba de todo lo que a ellos les pasaba.
A partir de entonces se conoce como Cabeza de Turco a aquella persona a la que se le culpa de algo, mientras que el resto de culpables quedan sin culpa alguna. Desde hace unos años es una expresión que se usa mucho. Ahora ya conocen el origen de esta curiosa expresión


Bueno, si lo cogemos todo, lo mezclamos un poco tenemos:
que los turcos y los cristianos no se llevaban bien, por aquello de la religión y el corte de cabezas,
que el sultán turco pierde la cabeza en Lepanto y esta es exhibida
que cuando a algún barco le pasa algo la culpa es "del turco"
que los turcos tras peder dos veces el asedio a Viena, son mofa en europa, de ahí el origen del cruasan
que en los campos de entrenamiento se le lanzan las lanzas a unos muñecotes con forma de "cabeza de turco"
que en las ferias se tira "la cabeza del turco"
y si suponemos que cuando había que pillar a alguien, por robar algo, y traer pruebas, seguramente se traería la cabeza de ese turco malo, malísimo que ha sido el culpable de todo lo que nos ha pasado, aunque por otro lado he escondido todo debajo de la losa, pues ya lo tenemos....


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