jueves, 1 de septiembre de 2016

De Fenicios o de otra forma de llamar a alguien Piel Roja


Birreme Fenicio
No, no vamos a hablar de indios, que no son de la India, los Pieles Rojas, que eran una tribu que habitaba en lo que hoy en día son los Estados Unidos, no, hoy hablaremos de los Fenicios, los pieles rojas de la antigüedad.



viernes, 17 de junio de 2016

De salir con los pies por delante y no por detrás

Esta expresión viene de la Grecia clásica, donde la religión exigía un respeto a los muertos, que se resumía en una serie de actos para evitar que los espíritus de estos se enfadaran con los vivos y no los dejaran en paz.
Caronte el barquero
Una vez que fallecía una persona, el hijo de ésta certificaba que su padre había fallecido y le cerraba los ojos y le ponía una moneda en la boca y le cerraba esta, esto era para evitar que el espíritu del difunto viera el mundo terrenal y quisiera quedarse y para pagar a Caronte el paso al Hades (el inframundo, terreno de los muertos, no confundir con Infierno).

Después se lavaba al muerto, se ungía con aceite y se le vestía con finas ropas blancas, el cadáver se ponía  en la entrada de la casa con los pies mirando a la pueta, tras unos siete días de velatorio, donde venían la plañíderas a llorar al muerto, a primera hora de la mañana un cortejo fúnebre llevaba el cuerpo siempre con los pies por delante, hasta el lugar donde sería cremado, la inhumación no era costumbre. Una vez cremado y según el estatus del difunto se erigía un monumento debajo del que en una urna se ponían los restos del crematorio en una urna. Era costumbre celebrar la memoria de los ancestros hasta unas tres generaciones después, entre otras cosas se hacían ofrendas al difunto y un banquete para los vivos.


sábado, 4 de junio de 2016

De celtas y bárbaros o dos formas de decir extranjero

Era de noche y sin embargo no llovía, cuando de repente como quien no quiere la cosa, me estrellé
con una palabra que creía conocer, pero hete aquí, que no.
La palabra es CELTA, todos pensamos, o casi todos que se refiere al nombre de un grupo de pueblos, cosa que es cierta, pero yo al menos nunca me había preocupado de su etimología, pero me resultó curioso enterarme que su significado es el mismo que BÁRBARO, o sea extranjero. La palabra viene del griego “keltoi” (bárbaro/ extranjero) y designaba, para los griegos, a todos aquellos pueblos situados más allá de los límites de su civilización. Ya son los romanos, y mas concreto Julio César, los que acabarán adoptando ese nombre para todos los pueblos de Francia, norte de la península Ibérica, islas británicas, Europa central y parte de la oriental. Os dejo un mapa de lo que se llamarán los pueblos celtas.



Al igual que acabaría pasando con los "pueblos Bárbaros", que en latín significaría pueblos extranjeros, y hacían referencia a cualquier pueblo que era externo al imperio Romano, los Celtas no serían nada mas que una forma de llamar a un grupo heterogéneo de pueblos "EXTRANJEROS" a la civilización Griega.

jueves, 31 de marzo de 2016

De leches y de Pepe Leches



Me preguntaba un amigo si sabia quién era el tal "Pepe leches" del dicho. 

Hay que decir primero que puede que el tal Pepe no existiera y se le sumaran todos los atributos de cegato por una historia primera y de ahí a la fama un paso.

Primero nos encontramos con un lechero sevillano del Viso del Alcor, miope el, que siempre acababa dándose golpes por todos lados, un día se vino a caer en un pozo que no tenía brocal, entre su trabajo y sus golpes, salió el dicho de "Pepe leches"

Segundo nos encontramos con un granadino, que tampoco veía bien, y que no paraba de darse costalazos, que acabó muriendo en plena guerra civil al intentar ordeñar un toro.

Tercero, un malagueño, también llamado Pepe, que le gustaba mucho el vino y cuando salía no veía demasiado bien, puede que por embriaguez o por defecto de visión.

La cuarta versión que he encontrado, la mas larga y completa, parece sacada de una comedia, nos cuenta la historia de un tal José Fernández Albusac, guardia municipal de Madrid, que no tenía problemas en cortar por lo sano y zanjar cualquier discusión o sancionar a cualquier viandante, rápido en utilizar los puños a diestro y siniestro, el decía 'ninguno es totalmente inocente cuando dos se pelean', lo que le valió el sobrenombre de Pepe Leches. 
El señor José Fernández, hacia 1845, sospechaba de la fidelidad de su señora esposa, entre eso y su mala vista,  le hacía pensar en regresar a su pueblo, alejado de la urbe y las murmuraciones de los conocidos, quería irse pero no perder el estatus y dignidad que le daba el puesto de guardia.
La mejor forma de conseguir todo eso, cree, es entrando en la Guardia Civil, cuerpo recientemente creado y donde posiblemente fuera destinado a un pueblo, por que no el suyo, donde sería respetado y su mujer alejada de las tentaciones de la capital. Es entonces cuando en una cena benéfica, a la que había sido asignado para prestar sus servicios, se entera de que viene el Duque de Ahumada, fundador de la Guardia Civil, y aprovechando un momento distendido, José Fernández se dirige a convencer al Duque de Ahumada de su valía como futuro Guardia Civil, cuando se cree en su presencia, empieza a narrar sus méritos y proezas, aunque no se da cuenta que se lo está contando a la hija de los anfitriones y no al Duque, el Duque lo convence de que para entrar en la Guardia Civil hace falta vista de lince.
Por último cuentan que murió atropellado por una carroza fúnebre cuando intentaba cruzar la calle para ir a encontrarse con su sobrina.